jueves, 1 de julio de 2010

simple y clarooo


Líneas blancas bordeando la punta de los dedos, limitando el trazo final donde termina nuestro ser en carne y hueso. Como sea, delimitan un final bastante concreto. Sin embargo inclusive en eso me gusta llevar la contra y extenderme más allá, salirme de mis uñas, irme, y nunca me alcanza con lo que abarco siempre me parece poco. En realidad a uno siempre le parecen muchas cosas, pero nunca lo correcto. Cuántos finales, cuántos obstáculos. Sopesamos opciones y criterios y nunca estamos de acuerdo con nada, porque no hay un orden preestablecido de funcionamiento, o el que hay no nos conforma. Las instrucciones se perdieron en el reenvío y el producto vino fallado. ¿A quién hay que hacerle el reclamo? Ya me cansé de lidiar con el papeleo del trámite, quejas y que nadie acuda a brindarme una solución. Nos tranquiliza pensar que en realidad estamos en el medio, entre lo malo y lo bueno, y le damos una gran personificación a ciertos seres, y lo peor es que le damos el poder que necesitan para existir. Pensamos que nosotros estamos en el medio y ellos son los que andan diviertiéndose con tirar de una cuerda atada a cada lado de nuestras manos, un poco de acá, un poco de allá, manejándonos. Les damos vida para justificar las cosas que nos pasan. Porque siempre la culpa la tiene el otro. ¿Cómo es la cosa? Soltemos la cuerda. Hagámonos cargo de nuestros actos y palabras. Porque cuando aparece la inestabilidad automáticamente pensamos que hay que cambiar el punto de vista para evitar a toda costa la caída. Te dicen que sin problema no hay solución. Así que tengo que definir el problema. Y problema está ACÁ. Siempre luchando contra la caída tratando de evitar cualquier tipo de desmoronamiento, cuando en realidad no tiene sentido. Dejemos de luchar contra el vértigo. De eso se trata, de vivir cayendo. Total caer es siempre lo mismo. ¿Porqué querer evitar algo con lo que ya vivimos? Es demasiado ridículo querer ir en contra de la inercia. Basta de impedimentos. Soltemos la cuerda, saltemos al vacío. A veces es bueno caer, tocar fondo, vaciarse, y volver ..

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